martes, 12 de octubre de 2010

Recuerdos marplatenses



Viendo a chiqui correr en el fondo del chalet de Mar del Plata, sentí una mezcla de alegría y nostalgia. Alegría porque a chiqui se lo veía tan feliz con todo ese pasto para corretear, pateando la pelota, jugando con sus autitos e investigando todo lo nuevo de esa casa. Nostalgia porque en esa casa, la de mis nonos, pasé muchísimas vacaciones y fines de semana largos, y lo guardo como uno de esos lugares a los que siempre me gustaba volver por lo que significaba para mi de chico ver a mis nonos y mis tíos, y compartir cada juego, caminata o día de playa.
Me encanta poder compartir ahora eso mismo con mi familia, que se sientan a gusto ahí, y que nuevamente le den vida a una casa que al llegar, como no está habitada permanentemente, se siente fría y vacía.

1 comentario:

P dijo...

Muy lindo lo que escribiste! Por supuesto que vamos a ir todas las veces que vos quieras y a darle vida con los chicos!

Un besote.
P